Papá y mamá se casan

Como te he dicho antes papá y mamá empezaron a caminar juntos (se hicieron novios) el día 25 de abril de 2004, lo que no te he contado es que nos conocimos en el gimnasio practicando full-contact y esto es cierto aunque no te lo creas, con nuestros guantes de pelea y todo.

Papá vivía de alquiler y mamá con los abuelos, pero aún así pasaban todo el tiempo que podían juntos, tanto que decidimos buscar una casita para vivir juntos y después de mucho buscar y hacer números conseguimos comprar la casa que más nos gustó. Esto ocurrió el 11 de marzo de 2005 y en cuanto la tuvimos nos fuimos a nuestra casa a vivir juntos.

La casa la verdad es que nos dio un poco de trabajo, una buena limpieza a fondo, muebles nuevos, una mano de pintura por aquí y otra por allá, cambiamos los suelos, un montón de trabajo, pero merecía la pena porque estábamos creando nuestro hogar y cada día estábamos más a gusto, hasta el punto que decidimos casarnos. ¡Qué locura esa de preparar una boda! y más aún para nosotros, que aunque vivimos en Tenerife decidimos casarnos en Utrera, en la tierra de papá.
Tardamos aproximadamente un año y medio en preparar hasta el último detalle de nuestra boda, pero la verdad es que mereció la pena porque fue un día inolvidable.
Nos casamos el día 23 de junio de 2007, sábado, en Utrera, nos hizo un buen día, un poco de calor pero nada insoportable. Además fue un día tan feliz para nosotros que parecía que estábamos en una nube.
Tenías que ver a mamá lo guapísima que estaba ese día, bueno, te voy a poner unas fotos para que la veas

¿Verdad que estaba preciosa?, hombre yo tampoco estaba mal, no te creas que mamá fue la única que se puso guapa para la boda, aquí te dejo unas fotos mías para que me veas

¿Qué te parece, estábamos guapos o no? Bueno, ahora te voy a poner una fotos de la boda para que aunque no estabas allí puedas ver qué bonita fue.

La boda duró todo el día, desde las 06:00 de la mañana que tenía que estar mamá en la peluquería hasta las 23:00 de la noche que nos fuimos del convite. Pero no nos fuimos a dormir, nos fuimos a la peña sevillista a ver la segunda parte de la final de la copa del rey que ese mismo día jugaba el Sevilla F.C. y que ganó por cierto, y como ganó nos fuimos a celebrarlo hasta que por fin, a eso de las 02:30 de la madrugada más o menos, el tito Fernando y la tita Mari Carmen nos llevaron al hotel, un hotel precioso, el hotel NH Congresos en el que la los titos Maribel y Dani nos habían regalado la noche de bodas.